Por qué los hombres no escuchan y las mujeres no entienden los mapas

Nuevo libro recomendado. ¿Nunca te has preguntado por qué a las mujeres les cuesta aparcar en línea o saberse guiar con un mapa? ¿Te has dado alguna vez cuenta de que los hombres no pueden hablar y escuchar a la vez o de que nunca suelen mostrar sus sentimientos? ¿Sabías que todo esto tiene una explicación científica y que la cultura tiene que ver bien poco?

Con un estilo claro y sencillo, Barbara y Allan Pease, un matrimonio del Reino Unido, explican mediante divertidos ejemplos cotidianos el porqué de las reacciones de ambos sexos ante una misma situación, así como a qué se deben basándose en los resultados de los multiples estudios científicos que han presenciado y recogido en los últimos años, muchos de ellos desconocidos para la mayoria de la gente.

Por ejemplo, se ha descubierto que hay un gen gay, que el número de violaciones en los paises nipones es menor que en los occidentales debido a la menor cantidad de testosterona en el organismo de los hombres de allí o que se puede rebajar la condena por un delito a una mujer si se demuestra que se encontraba bajo el llamado síndrome premenstrual cuando lo cometió. Soprendente, ¿verdad?

Los autores avisan desde el primer momento que el contenido puede no considerarse políticamente correcto y de ahí que normalmente se oculte, pero que la ciencia respalda estos hechos y que conocer los motivos que impulsan al sexo contrario a realizar determinados actos es básico para mantener una relación placentera y cordial con él. No somos iguales, sino diferentes, pero ninguno mejor que el otro es lo que predican.

Me lo leí hace unas semanas y me gustó. Muchas de las cosas que cuenta no las sabía y me parecieron interesantes. Eso sí, se me hace bastante repetitivo y caótico. Hubiera sido mucho más ameno, y eso que ya lo es, haber explicado cada cosa una sóla vez y haber empezado después a poner los resultados de los experimentos como curiosidades, ya que así hubiera salido además un libro la mitad de largo, sin exagerar, pero bueno. Por otra parte, lo recomiendo tanto a hombres como a mujeres, claro, pese a que hay excepciones a los cánones de conducta, como ellos mismos dicen.

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